Tipologia del Habeas Corpus

Introduccion El antecedente del habeas corpus lo encontramos en el Derecho Romano a traves del Interdictum de Homine Libero Exhibendo, interdicto legislado en el Digesto, que lo ejerce ante el Pretor el hombre libre para recuperar su libertad cuando se le habia dado el trato que entonces se daba a los esclavos En la Carta Magna que el Rey Juan Sin Tierra otorga en 1215 aparece en germen el habeas corpus. Alli se declara el derecho del noble ingles de no ser arrestado en virtud del mandato del rey. Asimismo, existen antecedentes del habeas corpus en el Fuero de Aragon y el Fuero de Viscaya

 En la Ley de 1665 los ingleses desarrollan el habeas corpus como garantia procesal y ya no solo como declaracion sustantiva de derecho En la Constitucion de los EEUU existen referencias al privilegio del habeas corpus. Dicha referencia demuestra que ese privilegio se conoce y ejerce tradicionalmente en las que habian sido las trece colonias. De la Constitucion Norteamericana el habeas corpus se proyecta a las Constituciones Latinoamericanas y especificamente a la Constitucion Peruana

TIPOLOGIA DEL HABEAS CORPUS Habeas Corpus Reparador:- representa la modalidad clasica del habeas corpus, la misma que se promueve para obtener la reposicion de la libertad de una persona indebidamente detenida. Se presenta, por ejemplo, cuando se produce la privacin arbitraria o ilegal de la libertad fsica como consecuencia de una orden policial; de un mandato judicial en sentido lato; de una negligencia penitenciaria cuando un condenado contina en reclusin pese a haberse cumplido la pena; por sanciones disciplinarias privativas de la libertad, entre otros.

. Habeas Corpus Preventivo.- Es aquel que se

otorga frente a la amenaza de eventuales detenciones. En este caso, se debera comprobar: a) la inminencia de que se produzca el acto vulnerador, es decir, que se configure un atentado a la libertad personal que est por suceder prontamente o en va de ejecucin, no entendindose por tal a los simples actos preparatorios; y b) que la amenaza a la libertad sea cierta, es decir, que exista un conocimiento seguro y claro de la amenaza a la libertad, dejando de lado conjeturas o presunciones