Está en la página 1de 1

Paradojas del Ego

Un equilibrista de circo necesita al menos dos destrezas para ser exitoso: fuerza para subir por la soga y ser capaz de caminar sobre la soga haciendo equilibrio con la vara. Igualmente, los gerentes requieren dos conjuntos de destrezas: unas les sirven para ascender y otras les sirven para los puestos de alta gerencia. Una persona que tiene un ego elevado, es buena en el ascenso. Su propio ego le da la fuerza y energa valorada por sus superiores. Cuando maneja pocos subordinados y est en ascenso, su ego no le causa muchos estragos. Su personal puede no estar muy contento, pero como son pocos, no hacen muchas olas. La persona con alto ego se esfuerza mucho por cumplir y exceder metas, por alcanzar resultados y generar buena imagen entre sus superiores. Sin embargo, los lderes con alto ego tienen problemas cuando llegan a la parte alta del "circo" que es la empresa y deben hacer un adecuado "equilibrio" interpersonal. Las destrezas que les permitieron subir, ya no les sirven y requieren otras habilidades. Las personas con alto ego son poco empticas, ya que no estn en contacto con su propia parte emocional. Al no tener empata, les resulta muy difcil retroalimentar y trabajar en equipo. Pero, adems, estn siempre buscando su beneficio personal. Al estar en una posicin ms visible les es difcil ocultarlo y sus colegas se dan cuenta, y como manejan mayor nmero de personas, el clima laboral se ve afectado y empiezan los problemas. Qu hacer si tiene una persona as en su equipo gerencial? Hay pocas posibilidades de que mejore. Una alternativa es asignarle un "coach" (entrenador) con su consentimiento. Una persona que la ayude a tomar conciencia de sus conductas. Pero si la persona no cambia, debemos evaluar el costo que tiene para la organizacin. Cuentan que un discpulo le cont a un maestro: "Me ha ido extraordinario en la villa, toda la gente me quiere, he logrado mucho. Me han agradecido mi trabajo y hasta se juntaron para felicitarme". El maestro tom la vela que iluminaba la noche y la tir a la fogata. El discpulo, consternado, le pregunt qu pasaba y el maestro explic: "As como la fogata consume la cera de la vela, las buenas acciones se disipan cuando te ufanas de ellas". Del mismo modo, los logros que puede conseguir el ego en metas y resultados se disipan con el terrible problema de clima y tica que genera a su alrededor.

David Fischman UPC

También podría gustarte