Tijuana, B.C.

, 28 de febrero de 2013

Hemos escuchado hablar muchas veces sobre personas que no tienen nada, y sin embargo, son mas ricas que nadie. Y esta vez, no es la excepcin: Su nombre es Marcos, no tiene hogar. Ha vido 48 aos, de los cuales, 26 los ha pasado deambulando por la calle pidiendo limosna y pasando sus noches de refugio en refugio. No es una sorpresa que en una vida as las enfermedades sean tan normales como respirar. Ya que comer es la suerte de la semana y el cuidado de la salud es un habito extinto. Pensar que todo inicio por

una simple cortada, hace que parezca pattico, pero as iniciaron los hechos. Le damos la gracias a los antibiticos de la edad moderna que nos permitieron mantener a Marcos con vida. Limpiando su herida y transmitindole la sangre perdida. Marcos mejoro su salud. Recibi trabajo en la perrera donde tuvo su accidente. Seguir tomando antibiticos durante meses, pero esperemos que todo mejore para el.