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Extraamiento de un espacio Abr los ojos.

La agitada vida de la calle que se colaba por la puerta balcn me hizo llegar el grito desgarrador que logr despertarme. La habitacin estaba a oscuras. Dnde estaba? Me costaba tener los ojos abiertos, me pesaban los prpados. Senta cuchillos clavarse en mi garganta y la boca reseca. Cmo haba llegado all? Estaba fresco. Pude percibir la suavidad de las sbanas cuando trat de taparme un poco ms. Una suave fragancia a jazmines inundaba el cuarto y el temor, mi corazn. Permaneca en la cama, acostada boca arriba, tapada hasta el cuello y por ms que escudriara en mi cerebro era imposible recordar las circunstancias que me haban llevado hasta all. Hacia la izquierda de la cama pude ver la puerta de entrada de la habitacin, cuyo tragaluz sin cortinas dejaba penetrar una luz tenue. Mis ojos se esforzaban en captar los detalles pero vea nublado y las formas de los objetos se distorsionaban. Quise levantarme y mi cabeza comenz a dar vueltas. Un mareo vertiginoso me empuj hacia la almohada nuevamente. Mantuve los ojos cerrados el tiempo que dur el mareo. Despus de unos segundos pas y fue entonces, al volver a abrirlos, cuando vi la puerta frente a la cama. Ahora poda escuchar con claridad los ruidos de la calle: los bocinazos de los autos, la frenada de un colectivo, la conversacin de dos personas El silencio de esta habitacin me inquietaba y esa puerta gris ceniza, opaca y deslucida me generaba una tremenda angustia. Dnde conducira? Y si de pronto se abra? El miedo le gan a la incertidumbre. Dios! Dnde estoy?

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