La Nia de la Pelota de Bsquet

Qian Hongyan, Voluntad de Vivir Y nos quejamos por nada . sandruyus

La pequea Qian Hongyan es un verdadero ejemplo de lucha y superacin. Esta pequea perdi las piernas durante un accidente de trnsito hace seis aos, y pese a las dificultades que debi enfrentar no se dio por vencida

Su familia al no tener los recursos necesarios para costearle la operacin y prtesis para rehacer su cuerpo, opt por ayudarla con un estilo casero, el cual termin llamando la atencin de todos los vecinos de la provincia de Yunnan, en la Repblica de China

Sus padres colocaron a la pequea, que en ese entonces tena cinco aos, sobre una bola de baloncesto con un hueco al centro, donde ella apoyaba el tronco y as arrastraba por el suelo o daba saltos, ayudada de un par de cepillos de lavar ropa en cada mano, para que le sirvieran de muletas. Por ese motivo vali el sobrenombre de Basketball girl (La chica del baln de baloncesto, en espaol

El amor de la familia hizo que la pequea Qian Hongyan reaccionara ante este nuevo reto con mucha fortaleza e incluso alegra, logrando desenvolverse sobre su bola como si fueran las mejores prtesis

La nia destac porque pese a haber perdido la mitad del cuerpo, no perdi la alegra de vivir, y se le poda ver sonrer mientras rebotaba camino a la escuela de Luliang, con el mismo entusiasmo que los dems nios de su edad, incluso fue una alumna destacada de la escuela. Al llegar al centro educativo reciba ayuda para salirse de la bola de bsquet y acomodarse en el pupitre, mientras en el suelo quedaba su improvisada prtesis. Al finalizar las clases, regresaba a su casa rebotando

Su esfuerzo y el de su familia se vieron recompensados cuando un grupo de destacados doctores ofreci un sofisticado par de piernas que le permitirn volver a caminar y dejar de arrastrarse sobre su bola. El proceso empez en el
ao 2005

La pequea Qian Hongyan utiliz por primera vez sus piernas artificiales en el Centro de Rehabilitacin de Pekn, China, luego de exmenes mdicos y un proceso de rehabilitacin. La alegra de la menor fue tanta que no dud en mostrar sus nuevas piernas para las fotografas de las diferentes agencias de noticias que calificaron su caso como inslito.

Cuando uno ve historias como esta, solo queda decirse a uno mismo: Hoy no me voy a quejar por nada, todo va estar magnifico, sea como sea.