Lucas 18.

18-30 Agregado de Marcos Agregado de Mateo

I. El Rey es bueno (18-19)

A. Digno de Toda adoracin (M1) B. Lo distingue su saber (1)

II. Se cumplen los mandamientos del Rey (20-21)

A. Referentes a la vida eterna (20) B. Referentes a la relacin con otros (21)

III. Se depende totalmente del Rey 23-25

A. Para llegar a ser perfectos (23) B. Cuando es nuestra prioridad.

IV. Todo el Poder le pertenece al Rey (26-27)

A. Mientras los subditos carecen de tal B. Para dar salvacin

V. Las recompensas las otorga el Rey (28-30)

A. En la regeneracin B. En este tiempo

Al salir l para seguir su camino, vino uno corriendo, he hincando la rodilla delante de l. Un hombre principal le pregunt, diciendo: Maestro bueno qu bien har para heredar la vida eterna? Jess le dijo: Por qu me llamas bueno? ninguno hay bueno, sino slo Dios. mas si quieres entrar en la vida eterna, guarda los mandamientos le dijo: Cules? Los mandamientos sabes: No adulterars, no matars, no hurtars, no dirs falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre. y amars a tu prjimo como a ti mismo l dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. qu ms me falta? Entonces Jess, mirndole le am Jess, oyendo esto, le dijo: Si quieres ser perfecto an te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres y tendrs tesoro en el cielo y ven, sgueme. Entonces l, oyendo esto, se puso muy triste, porque era muy rico. Al ver Jess que se haba entristecido mucho, dijo a sus discpulos: Cun difcilmente entrarn en el reino de Dios los que tienen riquezas! Porque es ms fcil pasar un cammello por el ojo de una aguja que entrar un rico en el reino de Dios. Y los que oyeron esto dijeron: Quin, pues, podr ser salvo? l les dijo: Lo que es imposible para los hombres es posible para Dios. Entonces Pedro Dijo: He aqu, nosotros hemos dejado nuestras posesiones y te hemos seguido. Qu pues tendremos? Y l les dijo: Decierto os digo, que en la regeneracin, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria vosotros que me habis seguido tambin os sentaris sobre doce tronos para juzgar a los doce tribus de Israel que no hay nadie que haya dejado casa, o padres o hermanos, o mujer, o hijos por el reino de Dios, que no haya de recibir mucho ms en este tiempo y en el siglo venidero la vida eterna. Pero muchos primeros sern postreros, y postreros , primeros.