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PARA T, MAESTRO Apstol de noble causa sin recompensa ninguna paladn del universo forjador sin leve pausa

ruiseor desde la cuna. Eres alma de la patria el artesano perfecto, navegante que en su barca va dejando en cada puerto dimensiones de arquitecto. Maestro que nada esperas recibir por tu enseanza, sigues sembrando en las aulas la luz de las nuevas eras lauros de sol y esperanza. Juan Gil Montiel.

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