Discover millions of ebooks, audiobooks, and so much more with a free trial

Only $11.99/month after trial. Cancel anytime.

Despertar Y Trascender: autobiagrafia espiritual de
Despertar Y Trascender: autobiagrafia espiritual de
Despertar Y Trascender: autobiagrafia espiritual de
Ebook620 pages7 hours

Despertar Y Trascender: autobiagrafia espiritual de

Rating: 0 out of 5 stars

()

Read preview

About this ebook

Despertar y Trascender es el diario espiritual de un laico casado y con hijos, quien durante mas de cuarenta anos ha escrito las luces e intuiciones de su vida de oracion en medio del trabajo cotidiano, la vida familiar, los viajes, los momentos felices y las experiencias dolorosas. Temas centrales de la vida cristiana como el dominio de si mismo, el misterio de la Creacion, la meditacion de la Palabra, la busqueda del Reino de Dios y la esperanza en la resurreccion aparecen en estas paginas sencillas y profundas como la gran inspiracion de la vida interior.

LanguageEspañol
Release dateMay 4, 2022
ISBN9781662489716
Despertar Y Trascender: autobiagrafia espiritual de

Related to Despertar Y Trascender

Related ebooks

Christianity For You

View More

Related articles

Reviews for Despertar Y Trascender

Rating: 0 out of 5 stars
0 ratings

0 ratings0 reviews

What did you think?

Tap to rate

Review must be at least 10 words

    Book preview

    Despertar Y Trascender - Luis Fernando Pardo Vargas

    Agradecimientos

    A Monseñor Juan Vicente Córdoba Villota. S.J. Obispo de Fontibón, por el Prólogo del libro, y por sus comentarios personales tan oportunos y acertados para la culminación de ésta obra.

    Al Padre Diego Jaramillo Cuartas, cjm, Presidente organización El Minuto de Dios, quien me impuso las manos en el seminario de Vida en el Espíritu, en los grupos de la Renovación Carismática y junto con sus charlas, seminarios, cursos, vigilias, cambió mi vida.

    A mi editor, mi sobrino Carlos Gustavo Pardo, hombre de fe sólida y pensamiento estructurado, que, con su conocimiento y buena voluntad, ha interpretado de manera magistral lo que le compartía en nuestros encuentros de trabajo y que me quedaba difícil poner por escrito.

    A mi amada esposa Juanita, gran luchadora, excelente madre, por el apoyo y respaldo que me ha dado sin medida y con quien quiero seguir afrontando los fracaso y éxitos que nos depare la vida.

    A mis hijos Andrea y Daniel, quienes me han acompañado con gran respeto y cariño en el buen desarrollo del libro.

    Prólogo

    Al empezar a leer este libro se experimenta la fuerza del espíritu Santo, que subyace en las experiencias vividas por el autor a lo largo de su vida. Inmediatamente el lector siente una invitación para participar de la fe y de la profunda experiencia de Dios, de quien experimenta su creaturalidad ante el Padre eterno, que desborda su entrega al comunicar plenitud de vida y amor al ser humano, constituido a su imagen y semejanza.

    Esa filiación divina del hombre, arruinada por el pecado, se restaura y se reconstituye definitivamente con la encarnación del Hijo de Dios, segunda persona de la Santísima Trinidad, que recibe la misión de recuperar todo lo que se había perdido, con la redención de la creación, al dar su vida por amor y resucitar para que vivamos eternamente con Él. Jesucristo devuelve al hombre la filiación con el Padre y la hermandad con el Hijo y restaura la fraternidad entre todos los seres humanos y la creación entera.

    El autor comunica su sentimiento profundo de ser redimido y enviado como misionero a comunicar la buena noticia de la redención, anunciando con ardor y alegría la salvación para todos. Qué bien expresa el autor el vivir esta realidad salvífica en comunidad, con profunda identidad y pertenencia al Pueblo de Dios redimido por Cristo, viviendo en la Iglesia, el imperativo de colaborar en la misión de Cristo para que no se pierda ninguno.

    Lo que más interpela en esta misión es la convicción profunda de la asistencia del Espíritu Santo, tercera persona de la Santísima Trinidad, para santificar a la persona, y con sus siete dones, inspirarla, animarla y acompañarla a desplegar la acción evangelizadora para que todos crean y se salven.

    Este es el objetivo del autor, tocar los corazones de sus lectores para que se abran humildemente a las mociones del Espíritu Santo en la Iglesia, para discernir la acción salvífica de Dios, buscar y hallar su voluntad en la vida y encontrarlo en todas las cosas y a todas las cosas en Él.

    Este libro es un instrumento evangelizador y catequético, para mover el espíritu misionero de quienes se acerquen a su lectura, para dejarse llevar por la fuerza del Espíritu Santo y experimenten la acción misericordiosa de Dios.

    El testimonio de vida y el anuncio de la buena noticia de la salvación, serán los medios altísimos del evangelizador que comunica convincentemente su experiencia de ser salvado por Dios.

    Luis Fernando desea comunicar y participar la misión recibida como laico en la Iglesia, con espíritu de Comunión, para comprometerse con Dios y los hermanos en esta tarea de que todos conozcan, amen y sigan a Jesucristo, el Ungido, el Mesías, el Redentor.

    Como obispo, pastor de la Iglesia católica, los invito para recibir con humildad este mensaje que nos llega por este seguidor de Jesús, para vivir lo que Cristo nos pidió hacer: Vayan por todo el mundo, anuncien lo que les dije, bauticen, y no teman, yo estaré con ustedes hasta la consumación de los siglos y las puertas del infierno no prevalecerán contra mi Iglesia.

    Monseñor Juan Vicente Córdoba Villota, S. J.

    Obispo de Fontibón.

    Índice

    Introducción

    Prefacio

    Claves para una lectura provechosa

    Primeros Frutos del Seminario de Vida en el Espíritu

    1.1. El inicio de un mundo nuevo

    1.2. Crecimiento en el Espíritu Santo

    Mi lucha espiritual en el trabajo independiente

    2.1. Primeras luchas contra el mundo

    2.2. Retorno

    2.3. Matrimonio y nuevos retos

    2.4. Pruebas y enfermedades

    2.5. Trabajo abundante

    2.6. Obstáculos en la vida

    2.7. Experiencias de luz interna

    2.8. Dificultades

    Adolescencia espiritual

    3.1. Mi encuentro con Job

    3.2. Encuentros de madrugada

    3.3. Frutos varios

    3.4. ¿Quién eres Tú? ¿Quién soy yo?

    3.5. Pruebas y oraciones

    3.6. Alma, cuerpo y espíritu

    3.7. Intimidad con el Reino

    Madurando en el Espíritu

    4.1. Trazos espirituales

    4.2. Pruebas cotidianas en mis viajes

    4.3. Un despertar con Job

    4.4. Inquietudes muy profundas sobre Job

    4.5. Más madurez

    4.6. El hombre nuevo

    4.7. Enfrentamiento conmigo mismo

    Mi gran soledad

    5.1. Inquietudes varias

    5.2. Conociendo más a Jesucristo

    5.3. Tribulación igual purificación

    5.4. Conociendo más al Espíritu Santo

    5.5. Ángeles

    5.6. Nuevas inquietudes espirituales

    5.7. Empezando a trascender

    5.8. Un nuevo despertar

    5.9. Vivencias en soledad

    Trascendiendo en el no-tiempo

    6.1. Los frutos del primer mandamiento

    6.2. El portal celestial

    6.3. Nuevas anotaciones

    6.4. Vivencias sobrenaturales

    6.5. Despertar y trascender

    Epílogo

    Introducción

    A mediados de 2017, mi tío Luis Fernando me pidió que le ayudara a editar un libro que llevaba escribiendo durante más de media vida. Era un diario conformado por una extensa colección de reflexiones breves, pensamientos, oraciones y relatos que contaban una historia de dificultades, reveses de salud y fortuna, luchas personales y realizaciones progresivas. Año tras año, desde 1975 el autor registró un diálogo interior al hilo de las circunstancias de la vida, que iba configurando una visión del mundo y de sí mismo dotada de un gran sentido de trascendencia.

    Hacia los veintiocho años tuvo un reencuentro con la fe de sus mayores en la Renovación Carismática Católica e inició un camino interior en el que ha permanecido hasta la fecha. El título Despertar y trascender resume las claves de sus convicciones: despertar a la realidad espiritual que encuentra su plenitud en la resurrección de Jesucristo, y trascender la temporalidad de la materia mediante el conocimiento de Dios y el gobierno de sí mismo. A medida que el libro avanza, se van desplegando otras ideas: la acción de la Santísima Trinidad, el hombre como un universo, la indispensable coherencia entre lo que se predica y lo que se practica, y el valor trascendente de actuar con rectitud en el mundo¹. Los temas se plantean con sencillez, de manera accesible, y se ilustran con múltiples ejemplos de la vida cotidiana.

    Mi labor con este libro, en colaboración con el autor, consistió en revisar, aclarar y explicar las meditaciones de su diario, para mejor comprensión de sus lectores. Luis Fernando las había escrito para sí mismo y algunos pasajes eran esquemáticos, presentaban lagunas o incluían términos que había que precisar. Como siempre se ha sentido más cómodo en la conversación que en la escritura, aproveché para preguntarle una y otra vez: «¿aquí qué quieres decir?», y su respuesta generaba con frecuencia un momento especial en que la aclaración iba más allá de lo esperado. Encontraba nuevas expresiones y evocaba recuerdos al tiempo que desplegaba un pensamiento claro y ordenado, cuyo contenido encontré valioso para enriquecer el texto final. La conversación en torno a sus explicaciones ocupaba la mayor parte de nuestras sesiones de trabajo y generaba extensos diálogos sobre el sentido espiritual, moral o doctrinal de cada punto del diario, a partir de los cuales se redactaba un texto aclaratorio ese mismo día. El producto de estas conversaciones aparece con regularidad en letra más pequeña a lo largo del libro.

    Considero que mi contribución más significativa a Despertar y trascender consiste en haber puesto mi experiencia académica, literaria y de reflexión sistemática sobre los temas de la fe, en función de la expresión adecuada y de la claridad doctrinal de las ideas del autor. Este apoyo comprende también la selección de los puntos del diario que se dan a la imprenta, la revisión redaccional y conceptual de dichos puntos, y la inclusión de notas interpretativas o aclaratorias al pie de página.

    Estimo la transparencia con que registra su historia, sencilla y profunda al mismo tiempo. Aprecio cómo enfoca su existencia en la esperanza en la resurrección, clave definitiva de la fe cristiana: si Cristo no resucitó, vana es nuestra fe². En su experiencia íntima, el Reino prometido es una realidad que se empieza a disfrutar en esta vida, mientras se espera su plenitud en la otra. También valoro la disposición de ofrecimiento, aceptación y perdón con que asume sus pruebas y adversidades.

    Despertar y trascender narra un proceso interior impulsado primero en la experiencia carismática y después con otros aportes de la tradición de la Iglesia. Aunque algunos sucesos relatados puedan parecer excepcionales, eran frecuentes en los años iniciales de la Renovación, donde muchas personas tuvieron diferentes vivencias espirituales que recibían con gratitud y asombro, pero también con cierto sentido de normalidad, en el contexto de una gran efusión del Espíritu³ que se expandió por el mundo poco después del Concilio Vaticano II⁴. Sin embargo, ni el editor ni el autor pretenden emitir un juicio sobre los sucesos relatados, sino solo dar cuenta de ellos como experiencias de vida interior, y del significado y los frutos para quien los vivió.

    Concluyo estas líneas agradeciendo a Luis Fernando su confianza al poner en mis manos la edición de sus escritos. También agradezco a su esposa Juanita y a mis primos Andrea y Daniel, a quienes deseo que encuentren en el contenido de este libro todavía más motivos para sentirse orgullosos de su padre.

    © Carlos Gustavo Pardo, Ph.D.

    Bogotá, 26 de agosto de 2021


    ¹ Las claves de su experiencia y de su reflexión se encuentran en los comentarios a 12.09.06; 30.09.06; 13.03.03; 18.02.09 (1); 19.05.14, y el Epílogo.

    ² Cf. 1Co 15, 13-19; 1Ts 4, 14.

    ³ Cf. Hch 2, 17-19; 1Co 12, 1-14, 40; Rm 2, 3-13; 1Ts 5, 19-22

    ⁴ Cf. Concilio Vaticano II, Lumen Gentium, 12; Card. Léon-Joseph Suenens, El Espíritu Santo, aliento vital de la Iglesia, Edicep, Valencia, 2010; Domenico Grasso, S.J., Los carismas en la Iglesia, Cristiandad, Madrid, 1984; etc.

    Prefacio

    El porqué de este libro

    A principios de los años 70, yo trabajaba como gerente de una Agencia Intermediaria de Seguros, muy exitosa, contaba con buenos ingresos, buena posición social, lo tenía prácticamente todo. Pero en mi corazón había un vacío muy grande y tenía muchos problemas. Éramos muchos hermanos en la casa y los mayores trabajábamos para colaborar al sostenimiento del hogar. Como es de esperarse, no era fácil la vida. Vivía los conflictos propios de la edad, además de los de la casa, ya que trabajaba desde los diez ocho años, estudiaba de noche y vivía en Chía, donde el transporte después de las diez de la noche era muy difícil.

    Mi mamá, notando mi ansiedad, me insistía que entrara a la Renovación Carismática, porque en el encuentro con Jesucristo a través de Espíritu Santo, tendría una experiencia única y me cambiaría la vida. Que esta nueva forma de pensar me prepararía para llevar con éxito todos mis problemas emocionales, sociales y económicos, como de hecho sucedió.

    Siguiendo el consejo de mi mamá, fui al Minuto de Dios y empecé a asistir a unas charlas que nos daba el Padre Diego Jaramillo. No me gustaban mucho los cantos y las palmas, pero conocí a una muchacha muy linda que me animó mucho. Así me fui interesando más, hasta que asistí a un Seminario de Vida en el Espíritu que dirigió el Padre Diego. Seguí participando en reuniones, vigilias, retiros, grupos de oración. El Padre nos preparaba para que diéramos los seminarios de la renovación con grandes frutos, durante sus charlas y conferencias tuve un gran crecimineto espiritual.

    A partir de todas estas experiencias, mi vida empezó a cambiar. Me entusiasmé muchísimo y empecé a tomar notas para que no se me olvidaran mis experiencias, y así poder consultarlas con el tiempo, ya que mi memoria no era muy buena,

    Nunca me imaginé que empezaría una lucha tan grande dentro de mí. La verdad es para valientes, pues tenía mucho miedo a la vida espiritual, que desconocía totalmente. A veces sentía que no podía más; otras veces, que estaba sobrado. Tampoco me imaginé que, con el tiempo, ya adelantada mi edad, me ayudaría a enfrentar los retos, dificultades y éxitos con muchísimo acierto en el Señor.

    Al pasar los años, un amigo que vio las notas me sugirió que las publicara, él creía que le podrían ayudar a muchas personas sin importar su edad, para crecer espiritualmente y vivir en paz.

    En pequeñas notas he plasmado un resumen de mi experiencia: Vida matrimonial, la muerte de mi hijo, de dos años y medio que murió accidente, quiebras económicas, trabajos en otras actividades diferentes a las habituales, pérdida de la salud por diferentes enfermedades, bienes, robos, afectos, etc., pasados ya a mis setenta años, la Santísima Trinidad, me ha dado mucho más de lo que necesito, y lo mejor ha sido experimentar el gozo más grande que he tenido, el de experimentar la vida eternal, no hay regalo más grande que Dios le dé a su creatura. Escribo esto para que mis lectores se animen a vivir en Jesucristo y descubran el gozo de la vida eternal.

    En este diario se va notando poco a poco el crecimiento de la vida espiritual, con sus experiencias, algunas luces y otras cosas muy interesantes. He escrito con base en mis lecturas de la Biblia, especialmente la edición de La Biblia de la Paz, traducción de Félix Torres Amat⁵, y mis meditaciones en los ratos de ocio, viajes, etc. Mis principales fuentes: los escritos de Diego Jaramillo sobre la Renovación Carismática; Imitación de Cristo, de Kempis; Catecismo de la Iglesia Católica; El combate espiritual y La Filotea o Iniciación a la vida de santidad, de San Francisco de Sales; Obras Completas del Pseudo-Dionisio Areopagita; la vida de San Juan María Vianney, santo Cura de Ars; La sabiduría de un pobre, de Eloi Leclerc; Sube conmigo, del Padre Ignacio Larrañaga, y el Santo Rosario. Soy un consentido de la Santa Virgen María, a quien cariñosamente llamo Mamá Linda. No me desprendo de Ella. Aquí encontrarán anotaciones muy importantes con las experiencias que he tenido con María.

    Como escribía estas notas al momento que las pensaba, las anotaba en cualquier papel que tuviera a la mano, pues no quería que se me olvidara el pensamiento. Pongo el día, mes, año y en algunos casos lugar y hora.

    Empecemos a leer. Tenme paciencia. Que Dios te ilumine y crezca dentro de ti, en el nombre de nuestro Señor Jesus Cristo el Nazareno. Él es Dios de dioses, Rey de reyes, Señor de señores, Luz de Luz, engendrado, no creado... Amigo que lees: ¡Adelante!

    Bogotá, 28 agosto de 2021.

    Claves para una lectura provechosa

    Si se leen estas notas hay que leerlas con una mente desprevenida, pensando que las escribí en la medida que las vivia y las sentia; por lo tanto, al paso de los años se va notando una mayor madurez. Creo que todo hombre que busque a Dios, la palabra y su vivencia espiritual, lleva a tener dudas y temores, de una forma u otra, como también tendrá algunas revelaciones que lo llenarán de alegría y ánimos para seguir adelante.

    No es conveniente no seguir el orden, ya que el continuar leyendo anotación por anotación, lo lleva a tener una mayor comprensión espiritual, la forma como lo he estado escribiendo y viviendo tiene una metodología maravillosa, la cual lleva a uno a vivir muchas situaciones ocultas y divinas, que no se pueden vivir sin una preparación adecuada. El camino de crecimiento espiritual al que invita la lectura de este libro es como el que menciona San Pablo: "Yo no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. Os di a beber leche, no alimento sólido, porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía, porque aún sois carnales. En efecto, habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales y andáis como hombres?".

    3 de agosto de 2001.


    Biblia de la Paz, Editorial Cultural Internacional, Bogotá, 2002, que reproduce la versión española de 1884. Es la traducción que más utilicé para las citas de este libro. Su versión del libro de Job me ha servido muchísimo en mi camino espiritual.

    ⁶ 1Co 3, 1–4.

    Capítulo 1

    Primeros Frutos del Seminario de Vida en el Espíritu

    (1975–1976)

    1.1. El inicio de un mundo nuevo

    Hacia finales de 1974 asistí al curso de la Renovación Carismática dirigido por el padre Diego Jaramillo, en el Barrio Minuto de Dios, en Bogotá, Colombia, durante un tiempo de estudios y esfuerzos por vivir las enseñanzas de Jesucristo, empecé a tomar notas de mis pensamientos y experiencias. Estas son las primeras.

    Año 1975

    09.08.75

    La palabra de Dios nos penetra para renovarnos. Una vez renovados, el Señor nos llama y, mientras menos resistencia pongamos, más serán las gracias recibidas. En la misma medida se abre un mundo totalmente nuevo y renovador.

    Es como cuando renovamos nuestros bienes materiales, pero en este caso son los bienes espirituales. Las frases en letra más pequeña al final de las anotaciones, las he ido poniendo después para facilitar su comprensión. En algunos casos incluyo la fecha o el año (05.17).

    08.09.75

    Las personas que se nos muestran prepotentes, a veces los vemos impotentes y temblorosos ante otros. Estos son los que más ayuda necesitan del Señor.

    No juzgar.

    23.09.75

    Si nuestra madre carnal llora por nuestra culpa y tratamos de consolarla, ¿qué hacemos nosotros por nuestra madre espiritual, María, que está llorando por todos nuestros pecados? Y si nuestra madre carnal nos comprende cuando hacemos algo que no debemos y trata de ayudarnos para salir adelante, ¿qué no nos dará la Virgen Santísima por ayudarnos a salir de nuestros pecados?

    La Virgen tampoco nos juzga; ella sufre en silencio.

    23.09.75

    Mi Madre Espiritual, María, es mi mediadora para alcanzar las gracias de mi Padre Celestial y de mi Hermano Jesucristo Dios, a través de los dones del Espíritu Santo, su Esposo. Mamita, ayúdame.

    Le pedimos su ayuda porque nuestra ignorancia es muy grande.

    29.09.75

    Nosotros, hombres pecadores y nacidos en el espíritu del pecado, somos redimidos en el Espíritu de Dios por los méritos de Jesucristo para que de este modo nos neguemos a nosotros mismos y el Espíritu Santo pueda obrar ya en un cuerpo purificado (o renovado).

    30.09.75

    Para mi Dios Padre:

    Señor, hoy estoy sin dinero porque me he endeudado en vanidades, pues he gastado mucho más de lo que recibo. Tal vez te busco porque estoy en esta situación económica. ¿Pero qué sucederá el día de mañana que reciba más plata o me organice en mis compromisos?

    Por eso yo quiero, Dios Padre, que, por los méritos de tu único Hijo Jesucristo, me concedas la alegría de ser recibido por ti ahora, en este mismo instante, como él más fiel de tus servidores en el orden que tú estimes conveniente, y te pido que me libres del orgullo que tengo, que tanto mal me hace y me des los frutos del Espíritu Santo, de la humildad y la caridad.

    02.10.75

    El Reino del pecado ya comenzó; el enemigo anda suelto con todo su poder. Ay de aquellos que no siguen a Cristo, pues los castigos son terribles. Oremos para que Dios perdone a este mundo y hagamos mucha caridad para entrar al Reino de Dios.

    Abortos, desórdenes sexuales de todo tipo, infidelidades, matrimonios rotos en aumento, desamor, uso indebido de las tecnologías. Mire lo que ha progresado el mal en 40 años.

    02.10.75

    Si ustedes supieran la alegría de vivir en el Espíritu de Dios, realmente vivirían.

    03.10.75

    Mientras no hagamos mucha penitencia, no conseguiremos los dones del Espíritu Santo, sobre todo, el de la caridad.

    08.10.75

    Nadie puede llamarse siervo del Señor hasta haber sufrido tentaciones. San Francisco de Asís.

    09.10.75

    Dios es tan supremamente bueno que nos ayuda en nuestras necesidades económicas cuando le pedimos de todo corazón, pero somos tan ingratos que después de la ayuda que nos da nos retiramos y volvemos al pecado. Señor Dios, te ruego que una vez que hayas solucionado mi problema, no me permitas por ningún motivo apartarme de ti.

    09.10.75

    Señor, tú conoces mi corazón y, si es realmente malo, te ruego el don de purificarlo; y si hay esta purificación, te suplico que no permitas por ningún motivo alejarme de ti y que más bien me acerque más a ti cada día, te lo pido por tu Hijo Amadísimo, Jesucristo.

    Realmente el único bueno es el Señor, pero la metodología continúa. Ahí se nota su arrogancia que hay en mí; la dejo porque eso somos, arrogantes. Hay que seguir adelante.

    20.10.75

    Señor Dios mío, por los méritos de tú Amadísimo Hijo, te ruego que no caiga en el pecado de creer saberlo todo; que me des prudencia, humildad y caridad. Te lo pido en lo más hondo de mi corazón, te lo pido.

    23.10.75

    La sensación que uno siente cuando tiene a nuestro Señor es la de una felicidad sin problemas. Los problemas son tan bien superados, que uno se asusta.

    28.10.75

    De las crisis más graves que uno puede tener:

    °Pensar que tiene toda la razón llevado por su propio parecer. Por eso, en esos momentos hay que orar y hacer penitencia.

    °No saber qué camino tomar. Pero teniendo paciencia y esperando, el Señor se manifiesta, iluminándolo a uno y en esta forma ir seguro para sus designios.

    29.10.75

    Señor y Dios mío, en estos momentos me encuentro bastante seguro de mí mismo; los problemas económicos que tenía, ya no los tengo (están bajo control), y mis problemas emocionales tampoco (están bajo control). Por esta misma situación, deseo pedirte a ti, de manera muy especial, te compadezcas de mí, pues no soy digno de que tú me tengas en tu Reino, y te pido que no me abandones jamás, que te manifiestes de otra manera... dándome amor y caridad. Te lo pido con todo mi corazón, con toda mi alma y con toda mi mente, por los méritos de tú Hijo Jesucristo.

    04.11.75

    Gracias te doy una vez más: Mi corazón, mi mente y mi alma, estamos todos juntos para servirte. Gracias Señor Dios.

    05.11.75

    Dios mío, te pido que cada vez que hable en tu nombre, sea para la unión de todo tu Reino, para el crecimiento espiritual de la comunidad y de mi espíritu, que yo no caiga en la desgracia de recibir atributos que no merezco; que hablar de ti sea para mí una obligación. Y dame humildad y muchas fuerzas, para que pueda seguir tu camino, pues reconozco que seguirte es muy duro y difícil. Por los méritos de tú amadísimo Hijo, te pido que me concedas ser tu hijo. Gracias Señor, mi Dios.

    05.11.75

    Dios mío, veo la pobreza que de ti hay en todos los hombres (incluido yo), ricos, pobres, acomodados, cultos, buenos, malos, etc. Te pido que me concedas la gracia y las fuerzas necesarias para darte a conocer. Te lo pido por los méritos de tu Amadísimo Hijo Jesucristo.

    05.11.75

    A usted le dicen que si adquiere tal vivienda, que si vive en tal sitio o que tiene tales bienes o si tiene TV o muebles, enseres, vehículos, ropa, etc., será feliz.

    Pero yo le digo que si no encuentra la felicidad en las condiciones en que está actualmente, nunca la encontrará, por más que la busque.

    Si busca de todo corazón a Jesucristo, la encontrará.

    05.11.75

    Mis oídos escuchan que mi amigo X estuvo con mis amigas A y D y con una mujer H, y con todas ellas ha tenido relaciones sexuales. Qué tristeza. ¿Será que mi amigo X busca la felicidad de ser hombre en estas cosas? ¿No será más bien que le trae inestabilidad?

    07.11.75

    Señor y Dios mío, hoy he tenido muchas dudas; creo que me estoy volviendo loco. Me cuesta trabajo comprender qué es tu Reino; estoy desanimado y creo que lo que he hablado de ti o hecho por ti no tiene ningún significado y, lo que es peor, que me resisto a creer que he hecho el bien, y que más bien la he embarrado, y por consiguiente estoy triste.

    Por lo tanto, Dios mío, ayúdame, no me dejes, por favor; te lo pido en tu Amadísimo Hijo Jesucristo.

    12.11.75

    Señor y Dios mío, siento en mi cuerpo una angustia y en mi mente me siento débil a pesar de que yo sé que tú me estás guiando. Por las cosas que veo y que me pasan, sé que tú estás actuando, pero mi mente se siente débil, cansada, perezosa y esta situación es la que me hace sentir impotente, aun ante el mundo. Por favor, Dios mío, por los méritos de tu Hijo, retira este cáliz, pero que se haga tu voluntad mas no la mía. Gracias Dios mío.

    30.03.78: Por favor, dame fuerzas.

    02.10.91: Por favor, dame fuerzas.

    12.11.75

    Señor y Dios mío, te doy gracias por aclararme la mente. Sé que hay una grave situación en el mundo y tú, a través de las enseñanzas de tú Hijo vas a poder liberar mucha gente del pecado.

    Entendiendo que pecado es la separación del hombre con Dios, su creador (2017).

    21.11.75

    En los últimos días he tenido una serie de pensamientos que me ha costado trabajo poner en orden. Los pensamientos son los siguientes:

    Encuentro que la mayoría de las personas buscan como único fin su bienestar personal con las cosas que tienen y, aún con lo que no tienen. Yo sé que eso está mal, pero también deseo las cosas materiales como si fuera mi único fin. Dios mío, ayúdame a ser libre en Ti.

    21.11.75

    Cuando descanses, descansa.

    Cuando trabajes, trabaja.

    Cuando estudies, estudia.

    Cuando ores, ora.

    Cuando te diviertas, diviértete, etc.

    Pero dedícate solo a una actividad y aprovéchala al máximo, con todas tus capacidades. No solo estas, sino cualquier otra actividad lícita y grata a Dios, y encontrarás un mundo diferente. Esto no quiere decir que, si surge un caso fortuito, no puedas dejar de hacer lo que se estaba haciendo.

    En todo momento dale gracias y honor a Dios por vivir un día más para su Gloria.

    27.11.75

    Ya no vamos a luchar unos contra otros, sino, al contrario, vamos a trabajar todos unidos.

    04.12.75

    Dios mío:

    Te doy infinitas gracias, te alabo y te bendigo, porque hoy me has dado verdaderamente el pan de cada día. Me refiero a las situaciones vividas con mis compañeros y mis jefes.

    11.12.75

    Señor y Dios mío:

    Con la humildad que tu Hijo me está dando, te doy gracias por comprender la importancia de servir a las personas, empresas, gobierno, etc., en tu nombre. Gracias, Dios mío.

    12.12.75

    Señor, Dios mío y de todos los hombres:

    El poder que estoy adquiriendo, te pido por escrito y de lo más hondo de mí corazón, que no vaya a ser para destrucción, sino más bien para unión de todo tu Reino. Te lo pido de esta forma porque el diablo me tienta muy seguido. Escúchame y haz tu voluntad mas no la mía, por los méritos de Jesús Cristo, te lo pido.

    12.12.75

    La responsabilidad no es tanto hacia una determinada actividad: nuestra vida es nuestra responsabilidad.

    12.12.75

    Dios mío, hoy sé más que nunca que tú sí existes en los hombres, que te manifiestas en ellos. Por favor, ayúdame a vivir tu vida, pues me doy cuenta de que seguir a tu amado Hijo es muy difícil, por todas estas cosas que nos atan al mundo y a los hombres; mejor dicho, a nosotros mismos.

    12.12.75

    Sentí en mi corazón que el Señor Jesús quería que compusiera este cántico con la música de la canción Hey Jude de los Beatles:

    Despierta que estoy contigo,

    Despierta que contigo voy,

    Despierta y piensa que contigo estoy.

    Anda a trabajar que contigo voy,

    trabaja hasta el fin que contigo voy,

    hasta el fin de la vida contigo estoy.

    Hasta cuando edité este libro, la cantaba.

    12.12.75

    Luis Fernando, Dios te dice dentro de tu mente que te mantengas alerta, para el servicio que te ha encomendado, para que en esta forma no te sorprenda haciendo cosas indebidas y así mismo crezca su Reino en ti.

    14.12.75

    Tarjetas de Navidad enviadas a los amigos en 75–76.

    Estimado Amigo...

    De todo corazón le deseo, que la llama que tiene dentro de su espíritu, crezca muchísimo y con esta, ilumine en la Luz del Amor, la Paz y la Alegría, a todos los que le rodean.

    Su Amigo, LFPV.

    Estimado Amigo...

    Sinceramente le deseo que tenga durante el año 1976, una Luz que nunca se acabe; de Amor, Paz y Alegría, Para que ilumine a todos los que le rodean.

    Reciba este deseo, de su amigo. LFPV.

    Estas tarjetas se las enviaba a presidentes, gerentes, ejecutivos de empresas, y amigos y parientes. Estas tarjetas marcaban una diferencia en su época, y las personas lo agradecían. Era una forma de llevar a Dios por el mundo (2017).

    17.12.75

    Señor y Dios de todos los hombres:

    Te pido en este momento que me escuches: no permitas que entre en mí el espíritu de la maldad; me hace mucho daño porque me crea desorientación. Ayúdame, te lo ruego. Por tu Hijo Amadísimo Cristo. Amén.

    18.12.75

    Gracias Dios, mío y de todos los hombres. Gracias, Cristo.

    19.12.75

    Luis Fernando, corrígete de ese orgullo y de saberlo todo. Cuanto antes mejor, y no trates de disculparte o de echarles a otros la culpa de tus obras mal hechas.

    1.2. Crecimiento en el Espíritu Santo

    En este tiempo asistí a diferentes seminarios de crecimiento, formé un grupo de oración y lo dirigí. También formé con compañeros de la Renovación grupos en diferentes partes del país. También trabajaba como ejecutivo en Seguros Carrizosa, del Grupo Bermúdez y Valenzuela, y manejaba directamente los seguros de personas del más alto nivel, incluido el presidente de la República. Al mismo tiempo, llevaba mis actividades apostólicas discretamente. No ostentaba ni lo uno ni lo otro, en ninguno de los grupos en donde que me movía.

    En ese tiempo compartí de cerca, en el Minuto de Dios, con otros jóvenes de mi edad como Camilo Bernal, Guillermo Echeverri, Bernardo Vergara y Bernardo Rameux. Hoy día los tres primeros son destacados sacerdotes eudistas. Los conocí a través de mi hermano Jorge, quien fue el primero de la familia en entrar en la Renovación. Por él entro mi mamá y por ella entré yo, y más tarde también otros de mis hermanos, entre ellos Gustavo, quien dedicó su vida a promover misiones laicales por diferentes lugares de Colombia.

    Conocer estos dos ambientes simultáneamente me sirvió para comprender el contraste entre la vida en el Espíritu y el espíritu del mundo, lo cual es una experiencia valiosísima. El Señor me pedía que empezara a soltarme de las ataduras del mundo pero que siguiera en él sin apegos, estando en el mundo sin ser del mundo.

    Año 1976

    07.01.76

    La desgracia de un hombre empieza en el momento que desea realizar su personalidad para beneficio egoísta de sí mismo, y no en beneficio de los demás.

    07.01.76

    Cuando tenga un deseo de gratitud, debo buscar, por encima de cualquier objetivo, manifestar el sentimiento con palabras que salgan del corazón.

    19.01.76

    Señor y Dios mío:

    Te pido que me envíes tu Espíritu para poderme quebrantar en mis ilusiones materiales, para que de esa misma forma pueda llevar tu mensaje a tu Iglesia. Lo pido en nombre de Jesucristo vivo.

    21.01.76

    Señor y Dios Mío:

    Te pido el don de concederme la sabiduría necesaria para afrontar los problemas que tengo con mis enemigos. Y que no los precipite a un mal peor creyendo que hago el bien con tu palabra.

    27.01.76

    Nuestra mayor necesidad es la de darnos a los demás. El que ya dio todo, tiene la libertad de darse a sí mismo. Pobre aquel que no se puede dar a sí mismo.

    27.01.76

    Señor y Dios mío y de todos los hombres:

    Te ruego, Dios Todopoderoso, porque te he conocido a través de tu hijo Jesucristo, te ruego muy humildemente que tengas compasión de mí, pues veo que tú sigues actuando y yo no soy digno de las grandes cosas que me has dado. Y te pido también, por la misma gracia, Jesús Cristo, que te he conocido, me envíes tu Espíritu Santo, para poder conocer cuáles son tus planes. Te lo ruego humildemente y temeroso de ti.

    29.01.76

    Señor y Dios de todos los hombres:

    Yo sé que tú siempre me escuchas, sé que las contestaciones que he dado en algunos casos están mal, sé que lo del señor X me inquieta, y sé también que el dinero y el ambiente me hacen mucho daño, aunque a través de él me santifico. Señor, por los méritos de Jesucristo, te pido que me orientes en mi vida y no me dejes caer en las tentaciones. Te lo pido con angustia, Dios Todopoderoso.

    Este señor del municipio de Chía, que me ofreció un negocio que me beneficiaba a mí, pero perjudicaba a otros. Estuve muy tentado por las necesidades que tenía, pero finalmente no lo acepté.

    16.02.76

    Cuando el Espíritu Santo habita en uno, ya no se comporta uno como antes, pues el Espíritu actúa de una manera diferente y llena de vida.

    Marzo del 76

    Señor, algo dentro de mi corazón me dice que debo formar un pueblo nuevo en tu amor. Te pido, Señor, que si es esa tu voluntad me lo hagas saber, y me des sabiduría para hacerlo.

    13.03.76

    Señor y Dios mío y de todos los hombres:

    Te ruego en este momento que atiendas todas mis suplicas, pues mi corazón está confundido desde hace varias noches. Tengo temor de ti y no sé a cabalidad ni tengo claridad sobre cuáles sean tus designios. No hago caso a mi conciencia, pues me atormenta el mal a toda hora. Cada vez que pienso cuál será mi misión en este mundo, con mis hermanos, me da hasta miedo ser hipócrita conmigo mismo, por lo cual te ruego, ten compasión de mí y oriéntame para ir seguro a tus designios.

    Escúchame, te lo ruego por tu amadísimo hijo Jesucristo, por tu palabra, ayúdame.

    Tuve una gran lucha interior al estudiar y poner en práctica a San Mateo, del capítulo 4 en adelante. Fue una batalla muy fuerte al comienzo, y muy dolorosa, como una espina en el pie. La sigo teniendo, pero ahora de una forma madura y controlada (2017).

    15.03.76

    El espíritu de la maldad es tan sutil que cuando alguien le hace daño a uno, le hace creer que esa persona es mala y, lo que es peor, eso que pasó lo lleva a decírselo a otra persona. Y eso es lo que más daño le hace al alma; y si no lo dice, le crea a uno confusión interna fuerte. Pero al decirlo le crea desequilibro por dentro, hasta cuando uno se arrepienta⁷.

    La gente come gente y no se dan cuenta de que se están haciendo daño unos a otros con sus palabras. El mal se alimenta de eso (2017). El bien del amor, y el alma se fortalece en uno dando dominio de sí mismo.

    16.03.76

    Mientras uno está cultivando, es dura la vida, para el cuerpo, alma y como para el Espíritu. Y mientras uno cultiva, tiene grandes esperanzas en Dios. Pero ¿qué sucede cuando empieza a recibir frutos?, a alabar al Señor. Y, ¿cómo hacer para no alejarse de Dios?

    24.03.76

    Señor y Dios mío y de todos los hombres, te alabo, te bendigo y te glorifico por los enemigos que tengo, porque así puedo conocerte más y ganar más gracias tuyas.

    Perdona que a veces no comprenda que necesito de los enemigos, pero te pido que en ese momento de angustia me ayudes más que nunca, te lo pido por los méritos de Jesucristo.

    22.04.76

    Jesucristo es la Verdad. La persona que vive con la Verdad da testimonio de la Verdad, porque Jesús vive en ella y ella vive en Jesús.

    ¿Qué es la Verdad? La Verdad es actuar siempre en el bien, no hacer cosas indebidas, no consentir pensamientos indebidos, no hablar mentiras, ser justo, verás, etc.

    ¿Cuándo vendemos a Jesús o la Verdad? La vendemos cuando, por una actitud mal hecha, decimos mentiras, cuando por una posesión mayor, por más poder o por una mujer, por poseer bienes o por dinero decimos mentiras o camuflamos la verdad, y por estas cosas vendemos a Cristo Jesús.

    Jesucristo: Ayúdame a no venderte.

    Estudiar y vivir lo escrito en Mt 5–7, es trabajo de toda la vida.

    22.04.76

    Mientras menos resistencia pongamos en nuestro corazón para seguir a Cristo-Jesús, más serán las gracias recibidas de su Padre. Luis Fernando, debes estar alerta, no te confíes. Seguir estudiando el Evangelio de San Mateo.

    03.05.76

    Señor y Dios mío y de todos los hombres:

    Te doy infinitas gracias, por hacerme comprender que, al estar en tu presencia, los problemas

    Enjoying the preview?
    Page 1 of 1