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Con ases en la manga
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Con ases en la manga

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About this ebook

La esencia de la comunicación consiste en algo tan mágico como trasladar una idea que existe en nuestra mente a la de otra persona. Y si lo que queremos es persuadir a alguien, tenemos que hacer un esfuerzo para lograr algo aún más parecido a la magia, que es conseguir que ese pensamiento surja en la cabeza de nuestro interlocutor como algo natural, sin que sea percibida cualquier intervención externa.
De esto trata este libro sorprendente en el que, aprovechando el legado de algunos de los ilusionistas más prestigiosos se propone una serie de prácticas que harán más efectiva la forma de comunicarse. Unas prácticas que, en cierta manera, ya están aplicándose, aunque no seamos conscientes de ello, en campos tan alejados de la magia como puede ser, por ejemplo, la política.

LOS AUTORES

Enric Llorens nació en Barcelona el 18 de octubre de 1956. Su carrera se ha centrado básicamente en la colaboración profesional, y como militante activo, en un partido politico ocupando a lo largo de los años distintas responsabilidades.

Jaume Moreno nació en Barcelona el 10 de diciembre de 1962. Su carrera profesional se ha desarrollado principalmente en la administración pública donde ha trabajado durante más de 20 años en el campo de la asesoría en comunicación política, lo que le ha llevado participar en diferentes campañas electorales.
LanguageEspañol
PublisherCarena
Release dateDec 17, 2014
ISBN9788415812302
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    Book preview

    Con ases en la manga - Enric Llorens Fleck

    Title page

    Primer prólogo

    Sentado en la silla de mi escritorio no sé muy bien cómo afrontar la tarea de escribir un prólogo al libro que el lector tiene en sus manos. Si quisiera ofrecerle, una metáfora visual de mi estado al enfrentarme a dicho encargo, creo que elegiría la más famosa escultura de Auguste Rodin: El pensador.

    Si parto de los esquemas mentales de mi faceta de ilusionista, no puedo evitar recordar la tarde en que conocí a Enric Llorens en un bar de la calle Berlín con Numància. Allí, con pocos preámbulos, me explicó su idea mientras le mostraba un excelente efecto de cartomagia basado en un delicioso principio matemático. Y me dibuja una sonrisa pensar que esta habilidad de ir directo al grano es una de las características personales que este coautor ha trasmitido al libro.

    También fue el momento en el que saltó mi alarma del escepticismo. La magia, como actividad lúdica y forma de expresión artística, que tantos momentos y experiencias memorables ofrece a sus practicantes y a sus espectadores, se encuentra en un mismo texto con la política, actividad humana que a día de hoy sufre un descrédito considerable en el momento social y económico que vivimos. ¡Menuda locura!

    Si también ha saltado su alarma al enterarse del contenido de este libro, ya la puede desactivar. Como diría mi compañero prologuista, Gutiérrez-Rubí: hay política más allá de la política institucional.

    Aquí se habla de las herramientas disponibles para lograr los objetivos que uno se marca. Herramientas para trasmitir mensajes y no para embaucar. Lo que nos cuentan Jaume y Enric es que hay muchas de ellas que son comunes para los políticos y los ilusionistas.

    Si algo tengo claro (y tiene su mérito, créame, hay muy pocas ideas claras en mi cabeza y mucho espacio por ocupar) es que la magia es un acto de comunicación. Permítame que haga una adaptación del típico problema filosófico del árbol que cae en un bosque sin nadie cerca que pueda oír su sonido al impactar contra el suelo. Imagine por un momento al ilusionista ensayando y puliendo su efecto mágico en la soledad de su despacho o garaje. Deposita tres monedas en un pañuelo de seda y las hace traspasar una a una a través del tejido del pañuelo hasta descansar en la palma de la mano. Sin un receptor-espectador para ese mensaje-ilusión, ¿ha tenido lugar la magia? Yo pienso que la respuesta es un rotundo no.

    Si la política es una actividad que bebe de la comunicación para vivir (o eso mantienen los expertos) al igual que hace el ilusionismo, no se puede pensar que intentar trazar puentes entre una disciplina y otra carezca de sentido.

    En varios momentos de la lectura del libro no puedo evitar ejercer mi papel de psicólogo por profesión: la comunicación verbal, la no verbal, la conducta humana, la percepción, los esquemas cognitivos, la psicología social y el comportamiento colectivo… Variables esenciales en la ecuación de la política a ojos de cualquiera. Y déjeme que le diga que… ¡también del ilusionismo!

    No puedo evitar fruncir el ceño por no haberme dado cuenta antes.

    Hay algo que me ha sorprendido en la lectura de Con ases en la manga, y es que, probablemente, sea de interés para más ilusionistas de lo que en un principio se pueda suponer. Si hoy en día hay pocas dudas de que el ilusionismo puede y debe inspirarse en el cine, la música, la literatura, la pintura, el teatro… ¿por qué no en la política? Quién sabe si Jaume y Enric están abriendo una pequeña caja de Pandora con el libro que el lector está a punto de leer.

    Enric me comentaba que el libro es rápido de lectura rápida y ligera. Y yo ahora le contesto que es tan rápido de leer como ganas de atender a los detalles tenga el lector. Y que es tan ligero de digerir como reflexiones quiera llevarse uno para discutir con la almohada.

    No les quepa la menor duda: Con ases en la manga es una pequeña locura. Una locura propia de dos locos como Jaume y Enric. Pero el tipo de loco sobre el que sentenció Mark Twain:

    Un hombre con una idea nueva es un loco hasta que la idea triunfa.

    Israel Belchi

    @magicatessen

    Segundo prólogo

    Lo primero que debo hacer es agradecer a sus autores la osadía y la ambición demostradas al escribir este libro. Su abordaje es diferente e innovador. Sobre las relaciones de la comunicación política con otras disciplinas y técnicas hay abundantes referencias: desde el ajedrez a las artes marciales, el yoga y la música. He de reconocer que una mirada desde la magia y el ilusionismo es sorprendente. Y, quizá, necesaria.

    El mago es humano, aunque su magia desafía los principios de Aristóteles cuando nos hablaba de los sentidos, las percepciones y los conocimientos, construyendo un puente secuencial invariable. Pero el mago, con su ilusión, te hace mirar sin ver, creer sin comprender, observar sin entender. Te engaña, pero —a la vez— te libera. Te confunde, pero te anima. Te despista, pero te hace soñar. Te hipnotiza, pero te sientes despierto y vivo. Su ilusión no es mentira; es juego, engaño y seducción. Y posee el tono de la verdad: es auténtica.

    La comunicación política está en constante evolución. La última de sus transformaciones tiene que ver con el impacto de las tecnologías —y sus redes— para la acción, la comunicación y la organización política. Pero los retos a los que se enfrenta (saturación publicitaria, descrédito, las nuevas plataformas y alternativas de comunicación, entre otros) obliga a una constante revisión e innovación. ¿Puede la magia, y sus principios, ayudar a este proceso de renovación? Es posible. Este libro lo explora con criterio y solvencia. Además, lo hace con un estilo ameno y simpático.

    Conozco a Enric Llorens y a Jaume Moreno y puedo afirmar que aman la política. La sienten. Y, a veces, la padecen. Por ello, resulta contagioso su deseo de más y mejor política, basada en la proximidad y la personalización. Afirman: «hay un tipo de magia que no debe variar nunca, o no debería hacerlo mucho, la magia de cerca, la del vis a vis, la magia en una mesa, con cartas, monedas, o con pequeños utensilios, la magia que conecta directamente con el público, aquella en la que el mago y espectador pueden verse el color de las pupilas. Aquella magia en la que no es necesaria la tecnología, en la que lo único que se necesita es capacidad de convicción, destreza, práctica, saber presentar y magia… Esta es precisamente la finalidad de la comunicación y, también, la de la política». Lo comparto.

    Sus autores han gozado con este libro. Se nota. La pasión por la comunicación y por la magia late constantemente en sus páginas. Que sea escrito a cuatro manos es una realidad y una metáfora; realidad y metáfora se entrecruzan en este libro, como las manos y los dedos de los magos. Juego de manos, juego de palabras. Nada por aquí, nada por allí… et voilà: ¡un libro!

    No es un libro para hacer trampas. No desean abonar el terreno para la política de la apariencia o de lo efímero. Su abordaje pretende indagar en lo lúdico y en lo escénico, y en los principios de la ilusión para hacer un recorrido honesto sobre recursos e iniciativas que ayuden a mejorar la comunicación política. No es un juego. Aunque su lectura pueda resultar, a veces, divertida y casi siempre muy sugerente.

    Los capítulos que siguen a continuación abordan el mundo de las percepciones como fundamento comunicacional básico. Documentan la importancia de lo intangible en la construcción comunicativa y relacionan el factor persuasivo con el liderazgo y su capacidad para crear una atmósfera, un personaje y un sueño; como los magos. Arturo de Ascanio, el padre de casi toda la magia actual española, señala que el personaje que pongamos en escena nos tiene que ir como anillo al dedo, pero, además, ha de poseer diferentes facetas a desarrollar, de tal manera que tengamos mucho para explorar: Lo primero que haremos es estudiar el personaje en detalle, si está en la vida real podremos conocerlo y observarlo mejor.

    Este prólogo no precede, no presenta. Quiere ser una invitación urgente y entusiasta. Un… ¡pasen y vean! Los autores se merecen su atención. Sin embargo, a diferencia de los magos tradicionales y convencionales, ellos nos descubren todos sus secretos en estas páginas. No se los guardan, los comparten. Rara avis en la profesión.

    Antoni Gutiérrez-Rubí

    @antonigr

    Dos mundos paralelos

    El 26 de febrero de 2013 la policía mexicana detenía en el aeropuerto internacional de Toluca de Lerdo a la presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo, por el desvío de 1.183 millones de pesos denunciado por el periódico El Universal. Acababa de esta forma la carrera política de la que fue considerada como la mujer más poderosa de México, gracias a la fuerza y la capacidad de presión sobre el Gobierno que le otorgaba encontrarse frente a una organización susceptible de movilizar a más de un millón de afiliados, el soporte de los cuales era primordial en las elecciones presidenciales.

    Gordillo, sin embargo, no creía que su considerable poder proviniese de la potente maquinaria sindical que tenía en sus manos, sino de los recursos mágicos que utilizaba para superar sus problemas y doblegar la voluntad de sus adversarios. Tanto es así que, según explica el periodista José Gil Olmos en su libro Los brujos del poder, se relacionaba con todo tipo de santeros cubanos. Tanta era su fe en la magia que, tras un enfrentamiento con el presidente Ernesto Zedilllo, se decidió a buscar los recursos sobrenaturales más fuertes que tenía a su alcance, pues los encantamientos utilizados por los santeros no iban a ser suficientes para imponerse a todo un presidente de la República, así que decidió emprender el que debía ser el viaje de su vida. Se fue hasta Badashat, en Nigeria, para encontrarse con un brujo experto en vudú.

    El chamán le dijo que podía aumentar considerablemente su fuerza a través de un hechizo consistente en el sacrificio de un león. El encantador mató al animal y restregó sus testículos y sus vísceras por el cuerpo de Esther para impregnarla con su sangre. Luego le ataron la piel del animal y con las pezuñas le dibujaron diversos signos.

    El ritual debió funcionar, ya que a pesar de las numerosas sospechas sobre su gestión logró mantenerse en el cargo durante más de 20 años, hasta el momento de su detención, mientras que Zedillo fue el primer presidente que dejó su puesto a un candidato ajeno al PRI después de la revolución mexicana.

    Éste es un ejemplo extremo de cómo la magia y la política se entrelazan, pero hay otras maneras de entender la magia totalmente alejadas de la superstición. Si volvemos la vista hacia la literatura nos encontraremos con el escritor británico Arthur C. Clarke, autor de la novela 2001, una odisea en el espacio, y también guionista de la película basada en su obra.

    Clarke formuló tres leyes particulares que explican las razones de los avances científicos y la manera en que una sociedad los interpreta.

    La primera de sus leyes dice que cuando un anciano y distinguido científico afirma que una cosa es posible, es casi seguro que esté en lo cierto; mientras que en el caso de afirmar que una cosa es imposible, probablemente esté equivocado.

    La segunda afirma que la única manera de descubrir los límites de lo posible es aventurarse un poco más allá, adentrándose en lo imposible.

    La tercera, la que más nos interesa en este libro, es la que enuncia que cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia.

    Desde tiempos inmemoriales la magia ha estado ligada a la ciencia, a la religión, al poder, y, por lo tanto, también a la política. Los caminos a recorrer son diversos, pero los brujos, los

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