Discover millions of ebooks, audiobooks, and so much more with a free trial

Only $11.99/month after trial. Cancel anytime.

Historia del 31 de Mayo: José Kentenich
Historia del 31 de Mayo: José Kentenich
Historia del 31 de Mayo: José Kentenich
Ebook92 pages

Historia del 31 de Mayo: José Kentenich

Rating: 5 out of 5 stars

5/5

()

Read preview

About this ebook

Textos de la primera parte de la carta a Monseñor Joseph Schmitz, en la cual el P. Kentenich trata de la importancia del 31 de Mayo como hecho histórico y como misión para la familia de Schoenstatt.

Editorial Patris nació en 1982, hace 25 años. A lo largo de este tiempo ha publicado más de dos centenares de libros. Su línea editorial contempla todo lo relacionado con el desarrollo integral de la persona y la plasmación de una cultura marcada por la dignidad del hombre y los valores del Evangelio.

Gran parte de sus publicaciones proceden del P. José Kentenich, fundador del Movimiento de Schoenstatt o de autores inspirados en su pensamiento. Por cierto, también cuenta con publicaciones de otros autores que han encontrado acogida en esta Editorial.

De esta forma Editorial Patris no sólo ha querido poner a disposición de los miembros de la Obra de Schoenstatt un valioso aporte, sino que, al mismo tiempo, ha querido entregar a la Iglesia y a todos aquellos que buscan la verdad, una orientación válida en medio del cambio de época que vive la sociedad actual.
LanguageEspañol
PublisherNueva Patris
Release dateMar 4, 2013
ISBN9789562463935
Historia del 31 de Mayo: José Kentenich

Read more from José Kentenich

Related to Historia del 31 de Mayo

Christianity For You

View More

Reviews for Historia del 31 de Mayo

Rating: 5 out of 5 stars
5/5

1 rating0 reviews

What did you think?

Tap to rate

Review must be at least 10 words

    Book preview

    Historia del 31 de Mayo - José Kentenich

    Kentenich

    Historia del 31 de Mayo

    Presentación

    (1)

    Durante su última estadía en Chile, en 1952, el P. Kentenich escribió, en forma de carta, un importante documento dirigido a Mons. Josef Schmitz, en aquel entonces superior de los Sacerdotes Diocesanos de Schoenstatt. De allí que esta carta se conozca como Joseph-Brief (Carta a José). La Joseph-Brief no constituye una carta de carácter personal, sino que es más bien un estudio en el cual el P. Kentenich aborda importantes cuestiones sobre Schoenstatt y el momento histórico por el cual atravesaba.

    La Joseph-Brief fue editada por Editorial Patris en Alemania, en 1971, bajo el titulo de Das Lebensgeheimnis Schönstatts(El misterio de vida de Schoenstatt). Consta de dos libros: Geist und Form (Forma y Espíritu) de 242 páginas y Bundnisfrömmigkeit (Espiritualidad de Alianza) de 278 páginas.

    El texto que ofrecemos en este tercer número de la Serie 31 de mayo, pertenece a la primera parte de este documento que el Padre fundador concluyó y envió desde Bellavista, el 31 de mayo de 1952.

    Por primera vez, el P. Kentenich escribe a los círculos dirigentes de la Familia para descorrer el velo de este enigmático día, es decir, del 31 de mayo de 1949. Sólo habían transcurrido tres años desde que había dado, en el recién bendecido santuario de Bellavista, en Santiago de Chile, un paso trascendental para toda la Obra de Schoenstatt y para su propia persona. Ello originó su destierro a Milwaukee (Estados Unidos), donde permaneció catorce largos años. Rumbo a ese destierro, partió el P. Kentenich desde Bellavista, el 21 de junio de 1952.

    Se había arriesgado a pronunciar una palabra de profeta, que también trajo consigo la suerte de profeta. Su decisión de hablar no fue rectamente comprendida. Incluso muchos de sus colaboradores no entendieron su modo de proceder.

    ¿Qué había sucedido? ¿Por qué actuaba de esa forma? ¿Qué significaba, en definitiva, el paso que había dado?

    El hecho que había desencadenado los últimos acontecimientos era la visitación canónica que decidió hacer el obispo de Tréveris –diócesis a la cual pertenece Schoenstatt en Alemania– al Movimiento, en particular a las Hermanas de María. La visitación se llevó a cabo entre el 19 y el 28 de febrero de 1949. El 27 de abril, el obispo envió su informe al P. Kentenich quien se encontraba en esos días en Sudamérica.

    El obispo, junto con declarar su conformidad y admiración por todo lo que pudo observar en Schoenstatt, manifestó ciertos reparos más bien de orden pedagógico, centrados en la relación de dependencia filial de las Hermanas respecto al P. Kentenich y al lugar que ocupaba el fundador en la vida de la Familia.

    El P. Kentenich vio en las críticas del obispo algo más allá de lo meramente circunstancial. Describió en ellas ese tipo de mentalidad que, según él, causaba tanto daño en la vida de la Iglesia, incapacitándola para responder adecuadamente a los desafíos del tiempo: el pensar, amar y vivir mecanicistas. Sintió que Dios le pedía hablar claramente, con toda objetividad, planteando su punto de vista. Mostró cómo lo que Dios había suscitado en Schoenstatt era de vital importancia para la Iglesia en las nuevas playas, si ésta quería abordar positivamente los grandes cuestionamientos que se debatían en Occidente y que lo encaminaban a su ruina.

    Con su Respuesta –así se llamó luego el documento que enviara al obispo de Tréveris y por su intermedio a todos los obispos alemanes (un documento de varios cientos de páginas)– se juega el todo por el todo.

    El 31 de mayo de 1949, terminada la primera parte de la Respuesta, se la ofreció a la Santísima Virgen en el santuario de Bellavista. Estaba plenamente consciente de las consecuencias que podía acarrear su arriesgada decisión:

    Tenemos que contar con que este trabajo hiera nobles corazones allá en la patria, que despierte una violenta indignación y haga que en respuesta se nos den fuertes y duros contragolpes. No nos admiremos si se forma un poderoso y unido frente común, de hombres influyentes, en contra mía y de la Familia. Humanamente considerado, tenemos que contar por último con que nuestro intento fracase completamente. Y, sin embargo, no podemos sentirnos dispensados de correr este riesgo. Quien tiene una misión ha de cumplirla aunque un salto mortal siga a otro. La misión de profeta trae consigo suerte de profeta". (Documentos de Schoenstatt, pág. 181)

    Y en verdad, fue así. Su respuesta al informe del visitador terminó llevándole al exilio en Milwaukee, a asumir sobre sus hombros una cruz mucho más dolorosa y prolongada que la del tiempo de persecución nazi y del campo de concentración de Dachau. Cruz que él nuevamente compartió con la Familia.

    Junto con enviar su Respuesta al obispo, el P. Kentenich realizó, desde Bellavista, un llamado, un nuevo acto de envío para Schoenstatt, en particular para el Schoenstatt en el ámbito cultural latino.

    La ley de la puerta abierta y el alma del pueblo latino le persuadían que Dios tenía un plan particular:

    ¿Será acaso un don que nos hace en pago, un reconocimiento y un honor para nosotros, si creemos que ella nos quiere usar desde acá, a partir de este día, para ganar una influencia más poderosa en la forjación de los destinos de la Iglesia en el espacio cultural de Occidente? (Doc. Sch., pág. 178)

    Desde Bellavista debía brotar una contracorriente que llevase abundantes bendiciones al Schoenstatt original. Esto último anunciaba, al mismo tiempo, un verdadero cambio de la circulación de la sangre para toda la Familia, en el sentido de la Internacional Schoenstattiana.

    A semejanza de lo sucedido con el Acta de Fundación en 1914,

    Enjoying the preview?
    Page 1 of 1