El Bautismo Del Espíritu Santo

ESPIRITUAL

Contenido

INTRODUCCIÓN

CAPÍTULO I

EL BAUTISMO  DEL ESPÍRITU SANTO:

QUÉ ES Y QUÉ HACE

CAPÍTULO II

LA POSIBILIAD Y NECESIDAD DEL BAUTISMO  DEL ESPÍRITU SANTO

CAPÍTULO III

CÓMO SE OBTIENE EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO

CAPÍTULO IV

NUEVOS BAUTISMOS DEL ESPÍRITU SANTO O VOLVER A LLENARNOS DEL ESPÍRITU SANTO

CAPÍTULO 5

CÓMO SE PIERDE EL PODER ESPIRITUAL

INTRODUCCIÓN

Fue un gran punto de inflexión en mi ministerio, cuando, después de mucho pensar, estudiar y meditar, me convencí de que el Bautismo del Espíritu Santo era una experiencia para hoy y para mí, y me propuse obtenerlo. Tal bendición vino a mí de manera tan personal, que comencé a dar lecturas bíblicas sobre el tema, y con mayor frecuencia con el paso de los años. Dios en Su maravillosa gracia ha bendecido estas lecturas, y tantos las han pedido en forma impresa, conveniente para la circulación entre sus amigos, que he decidido escribirlas en su totalidad para publicación. Es una gran alegría que últimamente hayan aparecido tantos libros, y tan excelentes, sobre la persona y obra del Espíritu Santo. Deseo traer atención especial a dos de ellos: Through the Eternal Spirit, (A través del Espíritu Eterno), de James Elder Cumming y The Spirit of Christ, (El Espíritu de Cristo), de Andrew Murray.

CAPÍTULO I

El Bautismo Del Espíritu Santo:

Qué es y qué hace

Si bien, en estos días, se habla mucho sobre el Bautismo del Espíritu Santo, es de temer que muchos de los que hablan de ello y rezan por él, no tienen una idea clara y definitiva de lo que es. Pero la Biblia, si se estudia cuidadosamente, nos dará una visión de esta bendición maravillosa que es perfectamente clara y está notablemente definida.

Primero, encontramos que hay varias designaciones en la Biblia para esta experiencia única. En los Hechos 1:5, Jesús dijo, Seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días. En los Hechos 2:4, cuando se cumplió esta promesa, leemos, todos fueron llenos del Espíritu Santo. En los Hechos 1:4, se habla de la misma experiencia como la promesa del Padre, y en Lucas 24:49 como la promesa de mi Padre y poder adquirido de lo alto. Por una comparación de los Hechos 10:44, 45, 47 con los Hechos 11:15, 16, encontramos que las expresiones el Espíritu Santo cayó sobre ellos y el don del Espíritu Santo, y recibieron el Espíritu Santo son todas equivalentes a bautizados con el Espíritu Santo.

2. Encontramos en el siguiente lugar, que el Bautismo del Espíritu Santo es una experiencia definitiva de la cual uno puede saber si la ha recibido o no. Esto es evidente del mandato de nuestro Salvador a los Apóstoles: Permaneced en la ciudad, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto (Lucas 24:49). A menos que esta investidura de poder o Bautismo del Espíritu Santo sea una experiencia tan definida que uno pueda saber si la ha recibido o no, ¿cómo podrían saber cuándo terminaron esos días de tardanza? Lo mismo está claro en la pregunta muy definida de Pablo a los discípulos en Éfeso. ¿Recibieron ustedes el Espíritu Santo cuando creyeron? (Hechos 19:2, R. V.) Pablo, evidentemente, esperaba un sí definitivo o un no definitivo por respuesta. A menos que la experiencia fuera definitiva, y de tal carácter que uno pueda saber si la ha recibido o no, ¿cómo podrían estos discípulos responder a la pregunta de Pablo? De hecho, sabían que no lo habían recibido ni habían sido bautizados con el Espíritu Santo, y poco tiempo después sabían que habían recibido o habían sido bautizados con el Espíritu Santo (Hechos 19:6). Pregunta a muchos hombres hoy, que oran para que se los bautice con el Espíritu Santo: Bueno, hermano mío, ¿obtuviste lo que pediste? ¿Fuiste bautizado con el Espíritu Santo? Y se quedaría estupefacto. No esperaba algo tan definitivo como para que pudiera responder positivamente a una pregunta como esa, sí o no. Pero en la Biblia no encontramos esa vaguedad e indefinición con respecto a este tema como lo encontramos en gran parte de nuestra oración y habla moderna. La Biblia es un libro muy definido. Es muy claro acerca de la salvación: tan definido que un hombre que conoce la Biblia puede decir positivamente sí o no a la pregunta ¿estás salvado?. Es igualmente definitiva sobre el Bautismo del Espíritu Santo: tan definitiva que un hombre que conoce la Biblia puede decir positivamente sí o no a la pregunta ¿has sido bautizado con el Espíritu Santo? Puede haber quienes están salvados y no lo saben, porque no comprenden la Biblia, pero saberlo es su privilegio. Entonces, puede haber quienes hayan sido bautizados