El 25 de febrero de 2021, unos doscientos científicos se reunieron por videoconferencia para conocer los resultados de la primera fase del experimento Muon g-2 sobre el comportamiento de los muones, unas partículas elementales parecidas a los electrones, pero más masivas e inestables. La investigación, iniciada en 2018, se llevó a cabo en el acelerador de partículas del Laboratorio Nacional Fermi (Fermilab), situado a unos cincuenta kilómetros de Chicago. Para garantizar la objetividad del proceso, la información que se iba obteniendo en el acelerador se cifraba: el resultado final debía interpretarse a la luz de un dato que había permanecido todo ese tiempo en dos sobres sellados y guardados bajo llave en el Fermilab y en la Universidad de Seattle. El encuentro por internet se convocó para abrir estos sobres y desvelar el desenlace del trabajo.
Fue entonces cuando llegó el momento con el que todos los convocados habían soñado: el muon, una de las diecisiete partículas elementales del modelo estándar de la física, no se comporta según establece la teoría vigente. Si esto se confirma en sucesivos experimentos, se abriría la puerta a una nueva física, a otra forma de interpretar la realidad en su estructura más básica.
Los resultados de esta primera fase de la investigación se comunicaron al público en abril de ese año, en una comparecencia en la que Chris Polly, codirector del proyecto, aseguró que “tal vez estemos ante monstruos que no habíamos imaginado y que interactúan con los muones; las diferencias que hemos detectado entre las observaciones y la teoría abrirían la ventana para encontrarlos”. Desde entonces, los científicos del Fermilab están analizando frenéticamente los datos ya recabados en las fases segunda y tercera del estudio, cuyos resultados se espera sean anunciados pronto, y Polly aseguró que habrá una cuarta fase.
Las mediciones del Fermilab sugieren que el muon actúa ajeno al modelo estándar de la física de partículas.
El físico Abel Lorente Campos fue uno de los participantes en la ya histórica reunión. “Había mucha expectación. Yo estaba muy nervioso porque era