
¿QUÉ ES LA DISOCIACIÓN? ¿ES UN TRASTOR-NO COMÚN?
P.B.: Es una capacidad que todos tenemos de desconectarnos de nuestro cuerpo y del momento presente. Mientras que leves disociaciones forman parte de nuestra vida cotidiana, como, por ejemplo, estar absorto en la lectura de un libro, las disociaciones agudas y crónicas suelen ser consecuencias de un trauma sufrido.
M.S.: La disociación implica separar o fragmentar también aspectos somatosensoriales de nuestra experiencia: podemos separarnos de las emociones (lloro, pero no sé por qué), desconectarnos de las sensaciones físicas, e incluso de conductas que no sentimos como propias. Hemos creado una cultura disociada, en realidad, pero como todos vivimos en ella hemos normalizado muchos mecanismos que en una vida natural no lo serían; la medicina es un ejemplo, desde los tiempos de Descartes se separó la mente del cuerpo.
¿CÓMO SE ELABORA LA TOPOGRAFÍA DEL YO Y PARA QUÉ SIRVE?
P.B.: Tenemos el hábito de vernos como “una persona”, cuando la realidad