LA BIBLIA ES EL LIBRO SAGRADO PARA JUDÍOS Y CRISTIANOS. Independientemente de cuál sea nuestra actitud ante las creencias religiosas, sus páginas han influido decisivamente en el desarrollo de los valores de nuestra cultura occidental. Aunque no se haya leído, todos estamos familiarizados con la mayoría de los relatos que se cuentan en sus primeras páginas: la manzana de Adán y Eva, el arca de Noé y el diluvio universal, Abraham y el sacrificio de su hijo Isaac, el éxodo de Moisés y el Arca de la Alianza… Pero, ¿cuál es el origen de todas estas historias? ¿Qué intencionalidad tuvieron los verdaderos autores de la Biblia al difundir estos relatos? ¿Es la Biblia, antes que un libro religioso, el producto de una campaña de propaganda política con oscuros intereses ideológicos? Esta es “la otra historia” del libro más vendido de todos los tiempos…
¿Y SI MOISÉS NO EXISTIÓ?
Los cinco primeros libros de la Biblia o Pentateuco (Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio), se identifican con la Torá o Ley de los judíos. Su autoría se atribuye a Moisés (siglos XIV-XIII a.C.), quien habría recogido por escrito lo que el dios Yahveh le habría dictado durante el largo éxodo de cuarenta años, que condujo al pueblo hebreo desde su cautividad en Egipto hasta la Tierra Prometida. Sin embargo, hoy sabemos que Moisés es un personaje legendario, de existencia más que dudosa, por lo que no pudo ser el autor de los primeros textos de la Biblia. Por otro lado, la diversidad de estilos literarios que integran el Pentateuco denotan que fueron escritos por varios autores, en épocas