
Planes para la Rectoría
En lo personal, debo señalar que es una gran satisfacción, pero también una gran responsabilidad, el hecho de que, después de 41 años de impartir cátedra en mi alma mater, mis compañeros profesores me hayan elegido y apoyado para alcanzar la Rectoría de la Escuela Libre de Derecho (eld).
He seguido siempre la tradición de la escuela, donde sus profesores han sabido combinar exitosamente la doble función de dar clase y dedicarse al ejercicio profesional del Derecho; es una manera acertada de compaginar la praxis con la teoría. Lo sé por esa experiencia personal que he vivido a lo largo de mi vida profesional y académica. Afortunadamente, una de las características principales de la comunidad de profesores de la eld es que hemos podido concretar y hacer efectiva esa combinación, obteniendo buenos resultados, consistentes en la calidad de nuestros egresados, reconocimiento que la sociedad nos ha otorgado a lo largo de la historia de la institución.
Hay muchos retos que afrontar en la nueva Rectoría, por supuesto. Pero, en esencia, lo más importante es que debemos continuar con nuestro propósito de brindar una educación de excelencia, así como fomentar la formación integral de los futuros abogados.