A unos días de iniciarse la Conferencia Mundial de la Unesco sobre Políticas Culturales y Desarrollo Sostenible Mondiacult 2022, que por segunda vez en su historia tiene como sede a México, ya se avizoran más disensos que consensos.
No sólo a nivel internacional: el panorama nacional es de escepticismo por lo que aportará nuestro país, y se cuestiona cuáles serán ios beneficios y el impacto del encuentro en campos como la política cultural, la paz, la desdibujada diplomacia cultural, el desarrollo y la justicia internamente.
Hace 40 años la ministra griega Melina Mercouri generó consenso en torno a la devolución, a sus países de origen, de obras de arte saqueadas, al demandar a Reino Unido el regreso de los mármoles del Partenón (que siguen en el Museo Británico). Sorprendió también el ministro francés Jack Lang, quien convocó a una cruzada contra el “imperialismo cultural”.
Ahora la conferencia se realizará del 28 al 30 de septiembre, con actividades en el Auditorio Nacional y el Conjunto Cultural Los Pinos. Será inaugurada por Audrey Azoulay, directora general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), y el presidente Andrés Manuel López Obrador. Según datos del organismo, se espera la participación de 157 ministros de cultura, asimismo de mil 500 participantes, 83 organizaciones no