LA VIDA OCULTA DE JESÚS NAVIDADES APÓCRIFAS

Lucas y Mateo sí introdujeron en sus libros algunas páginas dedicadas al nacimiento milagroso de Jesús, así como a los primeros de años de su vida, aunque, por desgracia, contaron historias distintas. Por ejemplo, ambos tuvieron el valor de proponer unas genealogías de Cristo por vía paterna, pero sus propuestas no coinciden en los datos que aportan, sin tener en cuenta que en las dos obras se afirma expresamente José no era su padre real…
Mateo, en sus primeros capítulos, mencionó el nacimiento virginal de Jesús, la visita de los Reyes Magos, la estrella de Belén, la matanza de los inocentes ordenada por Herodes, la huida a Egipto y el viaje a Nazaret, donde termina su relato de la infancia. Lucas, por otro lado, no dijo nada de los Reyes Magos, ni de la matanza de los inocentes, ni del viaje a Egipto. En cambio, relacionó el nacimiento de Jesús con otra milagrosa concepción, la de Juan el Bautista, al que prestó especial importancia; y mencionó algo que Mateo parecía no conocer: el viaje de José y María desde Nazaret hasta Belén, con motivo del famoso censo romano. De hecho, Mateo parece indicar que vivían allí, en Belén. Además, Lucas introdujo una escena inédita de lo más interesante que los otros evangelistas parecían desconocer: los tres días durante los cuales Jesús, siendo ya un mozalbete de doce años, anduvo perdido por Jerusalén hablando con los doctores del Templo.
Los exégetas cristianos, pese a estas devastadoras diferencias, intentaron unificar los dos relatos y crearon un corpus coherente que ha pasado a formar parte de la tradición cristiana. Pero sigue siendo inexplicable que Lucas, por ejemplo, no conociese la historia de los Reyes
Estás leyendo una vista previa, regístrate para leer más.
Comience el mes gratis