SAVE THE WORLD
La naturaleza pide nuestra ayuda a gritos, pero a veces no la escuchamos por miedo, desconocimiento o porque creemos que eso implica dejar nuestros trabajos para embarcarnos en una lancha en altamar. La realidad es que con pequeños cambios podemos detener y reparar un poco el daño que hemos hecho, porque si el planeta se desestabiliza, nos lleva de corbata. Por eso dedicamos nuestro especial a salvar a los animales, al mar, los árboles y al aire que respiramos para implementar acciones en nuestro día a día y construyamos el mundo que siempre hemos deseado.
EL PULMON DEL MUNDO
En la Ciudad de México pasamos por todas las estaciones del año en un día, pero la verdad es que esto se debe a la destrucción de los bosques. Cada año desaparecen 8.8 millones de hectáreas de bosque en el mundo (en México, medio millón). Al tener menos árboles, la temperatura aumenta y trae consigo los mil climas. Pero no sólo eso, sino que además se genera una escasez de madera y carbón, tenemos suelos infértiles, aire y agua menos puros. Acabamos con las culturas indígenas que viven de ellos, con los animales y, de paso, con nuestra propia
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