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Xabier F.

Coronado
En ese tiempo me toc compartir la covacha con Gaspar Garca Laviana. Yo lo conoca hasta entonces, cuando ya era cura-militar, cura-guerrillero. Para m fue un compaero, un amigo; tuve con l una relacin inolvidable. Yo estaba entonces embarazada de mi tercer hijo. Haca todo, como todos, pero me cuidaban. Sin paternalismos, pero me cuidaban. Me buscaban guayabas, por ejemplo, y si apareca una fruta siempre me la daban a m. Gaspar me cuidaba mucho tambin, por el nio que iba a nacer. Recuerdo que una vez me dijo: Puede que yo no llegue al triunfo. Pero si vos llegs a llorar cuando yo me muera, me voy a poner molestsimo. Lo ms que te permito es que me llevs alguna que otra vez unas florcitas, pero que sean del campo. Y nada de andar llorando, que yo voy a estar siempre metido en esto.
Nora Astorga

Xabier F. Coronado

Con Gaspar

CON GASPAR EN LA MEMORIA

Adems de sacerdote y guerrillero Gaspar tambin era poeta y sus poemas circulaban de mano en mano entre los guerrilleros del Frente Sur. Estos son poemas llenos de amor: amor al campesino, a las pobres prostitutas a las que tanto defendi enfrentndose a las autoridades somocistas, amor al paisaje al que l llama el lago ms bello del mundo, a la tierra por la cual muri. Y por lo mismo son tambin poemas llenos de ira. Esta es la poesa que lo llev a la guerrilla y a la muerte. Sus poemas son como canciones y se les podra poner msica para que los cante el pueblo. Gaspar Garca Laviana por su vida y su muerte es una inspiracin y un ejemplo a seguir para todos los sacerdotes, para todos los cristianos y todos los nicaragenses.
Ernesto Cardenal

en la Memoria
T LA C ediTores

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