INTRODUCCION
j Hoc. epee
La poda es una prictica habitual, me-
diante la cual es posible «cambiar» el
comportamiento de una planta para
obtener los resultados (principalmen-
te de cardcter productivo) que se de-
seen.
Sin embargo, para realizar correcta-
mente esta operaci6n es necesario co-
nocer, a través de la observacién y de
la préctica, el comportamiento natural
de los arboles en un ambiente concre-
to, para, de este modo, poder interve-
nir donde y cuando sea necesario.
En efecto, la poda modifica, tanto
durante breves periodos como a lo lar-
go de la vida de la planta, su creci-
miento y desarrollo.
De este modo, la estructura natural
y tipica de cada especie frutal arborea
puede ser modificada para distribuir
los recursos en favor de la fructifica-
cién.
Todas las operaciones (tanto las de
poda como las restantes) tienen, en
principio, la finalidad de acelerar el
ritmo del desarrollo de los Arboles j6-
venes, reduciéndose al minimo la du-
racién del perfodo improductivo.
Sucesivamente, la funcién de la
poda consistird en regular el equilibrio
entre vegetaci6n y fructificacién y en
facilitar todas aquellas intervenciones
en el cultivo que el desarrollo de la
planta necesite.FASES FENOLOGICAS
(CREASES BELFAIR
EI ciclo vital de los arboles se puede
dividir, esquematicamente, en tres fa-
ses principales: crecimiento, produc-
cion y vejez, vélidas tanto para las
plantas provenientes de semillas como
para las obtenidas por yfa asexual (en
especial por injerto, aunque también
destacan las producidas por esqueje,
acodo y mugrén) (fig. 1).
Actualmente, las plantas frutales
mas difundidas estan formadas en su
mayoria por dos individuos diferentes,
uno de los cuales pone a disposicién
las raices (sujeto, portainjerto 0 pa-
tr6n) y el otro la parte aérea (objeto,
injerto o piia de injerto) (fig. 2).
En este caso, tanto el crecimiento
inicial como la vejez son mas acelera-
dos, pero el periodo de reproduccién
resulta mas largo y precoz.
En las tres fases, la intervencién del
hombre es muy destacada, pero lo que
hace posible condicionar y orientar el
desarrollo vegetativo son los varios ti-
pos de poda. En la primera, el creci-
miento y desarrollo son més répidos
(posteriormente se mantendrin cons-
tantes), permitiendo a la planta la ex-
pansién de sus rafces en la tierra, la
consistencia del tronco y la distribu-
ciGn de sus ramas en la parte aérea.
Sin embargo, un buen desarrollo ra-
dical ser aquel que posibilite un and-
logo crecimiento de la copa. Por ello,
durante la primera fase del desarro-
Ilo, las rafces precisamente asumen ma-
yor importancia, utilizando la mayorfa
de las sustancias nutritivas producidas
por las hojas para desarrollar, de ma-
nera consistente, su aparato.
En efecto, hasta que las rafces no
alcancen una propagaci6n tal que les
permita abastecer de agua y sales mi-
nerales en abundancia toda la parte
aérea, no se iniciaré el proceso produc-
tivo.FASES FENOLOGICAS:
mw fig.
Formas de propaga-
cl6én de las plantas: A)
esqueje; B) acodo de
cepa; C) mugrén